Es bien conocido que la piel es el órgano que empieza a envejecer desde el nacimiento. Por otro lado está demostrado que el sol tiene efectos positivos para la salud ya que, con 15 minutos de exposición al día, ayuda a fijar el calcio de la alimentación en los huesos.
Hay que tener presente que:
- Los bebés menores de 6 meses no deben exponerse al sol.
- Los niños menores de 3 años deberían evitarse su exposición directa, ya que son los más sensibles a los efectos perjudiciales de los rayos solares.
- Si tienen la piel muy blanca se queman con mucha facilidad.
La exposición solar se debe realizar de forma gradual, para que la piel protegida se vaya adaptando a los rayos solares, con unas limitaciones.
- Evitar ponerse al sol en las horas centrales del día (de 12 a 17 horas).
- Evitar exposiciones prolongadas o dormirse al sol.
- Proteger adecuadamente toda la piel, la cabeza y los ojos con ropa, sombreros o gorros y gafas de sol.
- Utilizar productos de protección solar adecuados a su edad, tipo de piel y zona del cuerpo en la que se van a aplicar.
- Aplicar el protector solar unos 30 minutos antes de exponerse al sol y renovarse cada dos horas y después de cada baño.
- No olvidar que el riesgo de quemaduras solares se incrementa con la altura.
Recomendaciones del Dr. Antonio Redondo
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